El primero, creo que nuestro país vecino tiene grandes prejuicios sobre nosotros y no solo me refiero a las diferentes leyes que ya han aplicado en contra de la comunidad latina, si no más bien a la idea que tienen acerca de nosotros: tontos y violentos. Esta idea mal infundada esta presente desde la revolución, pues en las caricaturas de esa época aparece el famoso tio Sam, tratando de controlar a Villa, Zapata, Madero, etc… con el pequeño detalle de que los mexicanos aparecen como niños malcriados o como unos completos estúpidos.
Y esta relación aún continua, si nos damos cuenta, en un sinnúmero de películas estadounidenses, los sirvientes, los ladrones, los de barrios bajos, los estafados, entre muchas otras cosas negativas, sorpresivamente tienen rasgos latinos, o de cualquier nacionalidad con color de piel oscuro ( a tal grado que incluso Disney lo presenta de esa forma). Nos han tratado como la escoria de la sociedad, creyéndonos incapaces de superarnos a nosotros mismos o de superarlos a ellos y poco a poco el pueblo latino lo ha creído, a tal punto que vemos a todos los gringos como seres superiores a nosotros, cuando no lo son, lo único que tienen a su favor es la economía y el poder político (no, me mal entiendan, no digo que esto no tenga importancia), solo quiero recalcar que, México y Latinoamérica es rico, rico en paisajes, rico en hospitalidad, rico en cultura, rico en diversidad y rico en historia, lo cual EUA no tiene, pero todo eso ya no lo vemos, solo vemos el poder monetario.
Mi segundo ejemplo, va más enfocado hacia la comunidad adolescente, en todos lados, televisión, cine, revistas, etc.. Nos muestran la imagen de una chica esbelta, rubia, porrista, y que tiene a un puñado de chicos a sus pies, pero honestamente ¿quién es capaz de alcanzar todas esas características?, ni siquiera aquellas que las personifican, pues el maquillaje hace grandes cambios y el photoshop existe, el contra ejemplo de esto serían los “nerds”, aquellos que son perdedores, pero ¿en realidad es así?, yo digo que no, ellos son inteligentes, no tienen vicios y serán los futuros millonarios del mundo; es solo que su imagen no la hemos comprado, pues a la mercadotecnia no le gusta, ni le conviene que estemos conformes y pensemos: “ es mejor la superioridad intelectual” pues en ese caso nadie compraría marcas, nadie usaría cremas, nadie se teñiría el cabello, ni comprarían ropa de moda o tendencia. Somos producto de aquello que les conviene a los empresarios y en vez de oponernos y beneficiarnos a nosotros mismos, los seguimos como mosquitos a la luz.
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